Hola!!
Solo comentaros que la semana pasada fui a la endocrina. No era la mía, puesto que está de baja, sinó una sustituta muy amable. Me dijo que iba muy bien con la pérdida de peso y me mandó otros análisis complementarios de los que me pidió la nutrióloga.
Me comentó que no tomara zumos (porque tienen demasiado azúcar), que era mejor tomar fruta natural.
También me comentó que tuve mucha suerte que me aceptaran la operación en la mutua (me operé con Adeslas) porque con Sanitas, ellos han enviado el informe para 10 personas y solamente han aceptado 3. No sé los motivos por los cuales no aceptaron los otros siete, pero quizás han endurecido los criterios.
Desde la semana pasada no he bajado nada, pero tengo que reconocer que solamente pude ir un día al gimnasio (los otros días sí caminé la hora estipulada) pero es que este fin de semana estuve en casa, así que algo me pasé con la comida y algún trocito de dulce cayó. Eso sí, todo me ha caído bien.
Bueno, el jueves voy a pincharme la inyección de B12. No sé qué efectos puede tener. Si noto algo ya os lo comentaré.
Un saludo tod@s.
29/10/13
22/10/13
Tres meses y otras cosas
Hola!!!
El jueves de la semana pasada, día 17, hizo tres meses de mi operación. Han sido unos meses que me han pasado muy lentamente pero supongo que se debe a que la alimentación no acompañaba...
La operación y el post-operatorio no es un camino de rosas. No es fácil ni cómodo y se tienen que asumir las posibles incomodidades del post-operatorio (náuseas, vómitos, comer poco y lentamente, no poder beber durante las comidas, diarreas -en según qué técnicas-, medicinas, colgajos, etc.). Lo comento porque últimamente he leído varias quejas de personas que se habían operado sin tener en cuenta todo lo que se tiene que pasar y también para reivindicar que es un compromiso con nuestra salud. Es una herramienta para ponernos en un peso similar al de las otras personas y partir sin desventaja, pero de ningún modo es una finalidad. Quiero decir que el estar operados no nos garantiza que no podamos volver a engordar. Para nada. Tenemos que comer sano y hacer ejercicio porque si no, como todo hijo de vecino, vamos a engordar.
Bueno, después de este inciso, os comento que, de momento, no he encontrado ningún alimento que me haya caído mal y eso que ya he comido muchas cosas: lechuga y tomate en ensalada, además de verdura pasada por la paella (judías verdes, espárragos, champiñones, cebolla, etc.), marisco (mejillones, almejas, calamares, etc.), tostadas (que me caen fantásticamente), fideuá, paella, hamburguesa, gallo, huevo duro, queso, fruta fresca (piña, melón, sandía, mandarina, nectarina, kiwi, chirimoya, granada...).
En principio tengo que comer cada dos horas, pero a veces estoy más tiempo y otras, como antes porque ya tengo hambre. Más o menos tomo la mitad de un plato de postre para la comida y la cena, que ya vienen a ser los 100 ml que me indicaron y quedo llenísima. Tengo que vigilar de no pasarme porque luego estoy un ratito con gases (me da como una especie de rugido interior, ha, ha). Pero no hay más consequencias.
Por cierto que aún no me he puesto las inyecciones de B12 que me tenía que poner cada mes, pero ya le he puesto solución y la semana que viene me la van a poner. Tampoco no he notado nada... Cuando vaya a la revisión de los seis meses, tengo que llevar unos análisis muy completos que me encargaron y ahí se verá si tengo déficit de algo, pero no lo creo, con las medicinas y suplementos que me tomo...
En cuanto al peso, si os fijáis, he actualizado el gráfico. Ahora estoy en 73,6 kg, así que, más o menos, he perdido 15 kilos en tres meses. También he cambiado la meta, no los 55 kg que pensaba yo ni los 62 que me comentaron en la visita. He puesto 60, ya veremos si llego pero para ello me quedan más de 13 quilos... En fín, al menos lo voy a intentar con el gimnasio y las caminatas, aunque estas semanas próximas solamente voy a poder ir al gimnasio un día a la semana porque he vuelto a empezar la radiofrecuencia. Ahora en el abdomen, a ver si se reduce algo, porque es dónde se concentra más grasa.
Ah, se me olvidaba una buenísima notícia: desde que me volví a poner los parches de Trofolastín, las heridas han cicatrizado bastante, se nota mucho y ya no están tan abultadas como la semana pasada. Si fuera ahora, los hubiera llevado todo el tiempo, en lugar de ponerme la rosa mosqueta, pero bueno, ya veremos si puedo rehacer el "entuerto".
Y me he comprado ropa nueva. La talla 46 de pantalón ya me está algo holgada, pero de vestido aún necesito la 48, pero son tallas que hacía muchísimos años que no me podía poner, así que estoy muy contenta con todo el proceso.
Un beso a tod@s l@s que se pasen por aquí.
El jueves de la semana pasada, día 17, hizo tres meses de mi operación. Han sido unos meses que me han pasado muy lentamente pero supongo que se debe a que la alimentación no acompañaba...
La operación y el post-operatorio no es un camino de rosas. No es fácil ni cómodo y se tienen que asumir las posibles incomodidades del post-operatorio (náuseas, vómitos, comer poco y lentamente, no poder beber durante las comidas, diarreas -en según qué técnicas-, medicinas, colgajos, etc.). Lo comento porque últimamente he leído varias quejas de personas que se habían operado sin tener en cuenta todo lo que se tiene que pasar y también para reivindicar que es un compromiso con nuestra salud. Es una herramienta para ponernos en un peso similar al de las otras personas y partir sin desventaja, pero de ningún modo es una finalidad. Quiero decir que el estar operados no nos garantiza que no podamos volver a engordar. Para nada. Tenemos que comer sano y hacer ejercicio porque si no, como todo hijo de vecino, vamos a engordar.
Bueno, después de este inciso, os comento que, de momento, no he encontrado ningún alimento que me haya caído mal y eso que ya he comido muchas cosas: lechuga y tomate en ensalada, además de verdura pasada por la paella (judías verdes, espárragos, champiñones, cebolla, etc.), marisco (mejillones, almejas, calamares, etc.), tostadas (que me caen fantásticamente), fideuá, paella, hamburguesa, gallo, huevo duro, queso, fruta fresca (piña, melón, sandía, mandarina, nectarina, kiwi, chirimoya, granada...).
En principio tengo que comer cada dos horas, pero a veces estoy más tiempo y otras, como antes porque ya tengo hambre. Más o menos tomo la mitad de un plato de postre para la comida y la cena, que ya vienen a ser los 100 ml que me indicaron y quedo llenísima. Tengo que vigilar de no pasarme porque luego estoy un ratito con gases (me da como una especie de rugido interior, ha, ha). Pero no hay más consequencias.
Por cierto que aún no me he puesto las inyecciones de B12 que me tenía que poner cada mes, pero ya le he puesto solución y la semana que viene me la van a poner. Tampoco no he notado nada... Cuando vaya a la revisión de los seis meses, tengo que llevar unos análisis muy completos que me encargaron y ahí se verá si tengo déficit de algo, pero no lo creo, con las medicinas y suplementos que me tomo...
En cuanto al peso, si os fijáis, he actualizado el gráfico. Ahora estoy en 73,6 kg, así que, más o menos, he perdido 15 kilos en tres meses. También he cambiado la meta, no los 55 kg que pensaba yo ni los 62 que me comentaron en la visita. He puesto 60, ya veremos si llego pero para ello me quedan más de 13 quilos... En fín, al menos lo voy a intentar con el gimnasio y las caminatas, aunque estas semanas próximas solamente voy a poder ir al gimnasio un día a la semana porque he vuelto a empezar la radiofrecuencia. Ahora en el abdomen, a ver si se reduce algo, porque es dónde se concentra más grasa.
Ah, se me olvidaba una buenísima notícia: desde que me volví a poner los parches de Trofolastín, las heridas han cicatrizado bastante, se nota mucho y ya no están tan abultadas como la semana pasada. Si fuera ahora, los hubiera llevado todo el tiempo, en lugar de ponerme la rosa mosqueta, pero bueno, ya veremos si puedo rehacer el "entuerto".
Y me he comprado ropa nueva. La talla 46 de pantalón ya me está algo holgada, pero de vestido aún necesito la 48, pero son tallas que hacía muchísimos años que no me podía poner, así que estoy muy contenta con todo el proceso.
Un beso a tod@s l@s que se pasen por aquí.
13/10/13
Cambio de dieta... al fin!!
¡Hola a tod@s! Pues sí. el jueves fui a la visita con la nutrióloga y ya puedo comer cosas sólidas, ufff, parecía que no llegaría nunca... Bueno, os cuento con más detalle:
Me preguntó si había vomitado o si algo me había caído mal, a lo que le dije que no y me dijo que esto era porque había hecho las cosas bien. Me dijo que a partir de ahora, coma en plato de postre (ya lo hacía) y con cubiertos de postre (también lo hacía). Que no me pase de los 100 ml. de siempre y que lo mastique todo muy bien y durante un buen rato para que al tragar tenga consistencia pastosa. Me recordó que no se puede beber durante las comidas y yo le dije que esto era lo más duro y que lo que hacía era beber 10 minutos antes o después, no esperar la media hora o la hora recomendada. Me preguntó si me caía bien y como le dije que sí, me dió su consentimiento a seguir así.
Sobre la comida, puedo comer casi de todo, de momento como si hiciera dieta. Me explico: dentro de los alimentos totalmente desaconsejados (que no prohibidos) están los dulces, bollería, helados cremosos, chocolate, frutos secos, aguacate,embutidos y carnes grasas, mantequilla, refrescos azucarados, vino y licores, leche condensada, quesos grasos, mermeladas y conservas de pescado con aceite o escabeche, etc., es decir, lo mismo que te quitan cuando haces dieta. Eso no significa que excepcionalmente no lo pueda comer, pero si queremos perder peso, es conveniente comer cosas más saludables...
También me han recomendado no comer verduras flatulentas como la col, coliflor, pimientos (no tenía ni idea que fuera flatulento) y también las alcachofas. Y que utilice sacarina en vez de azúcar (eso lo he estado haciendo toda la vida, así que vamos a continuar con ello!).
Entonces, ¿qué puedo comer? Os pongo la lista a continuación:
- Lácteos: leche y yogur (mejor desnatados), queso fresco, flan, natillas.
- Carne magra picada (hamburguesas, albóndigas)
-Pescado blanco (lenguado, rodaballo, gallo, merluza, rape, bacalao...)
-Huevo (en tortilla o pasado por agua. Supongo que duro también vale, porque es de la única manera que me lo puedo comer...)
-Embutidos: jamón york y pavo.
-Patatas, solamente hervidas y 50 g al día.
-Verduras: todas a excepción de las que he comentado antes. Se toleran mejor hervidas o en puré, pero también puedo empezar a tomarlas en ensalada.
-Fruta fresca madura o cocida (no en almíbar).
-Cereales: arroz, pasta, pan tostado.
La idea es comer algo cada 2-3 horas, un mínimo de 6 veces al día y en función del hambre, más. Yo empecé el viernes e hice las 8 tomas que recomiendan en el menú de ejemplo (estos días en que me tiene que venir la regla, tengo mucha más hambre que el resto del mes.).
Ya he tomado pan tostado, tomate, pepino y espárragos blancos en ensalada, huevo duro, granada... y todo me ha sentado fenomenal. Como ya os comenté en la entrada anterior, hace algunas semanas ya empecé a tomar jamón york y queso fresco y también hamburguesa de ternera (casera) y arroz (paella) sin triturar.
En cuanto al peso, la nutrióloga me dijo que debía quedarme con 62 quilos (a mi me parece excesivo, pero de momento esa va a ser mi meta). Según su báscula, en la que me peso vestida, pesaba 75,3 kg. (En la mía, desnuda, 74 kg). Según ella, he perdido un 39% de lo que tengo que perder pero a mi no me salen las cuentas: si pesaba 89,5 antes de la operación (según sus datos, que no los míos), y tengo que llegar a 62, son 27,5. Si he perdido 14,2, entonces me quedan por perder 13,3 así pues, he perdido algo más del 50% del peso en que, según ellos, debo quedarme. Ya veremos...
En fin, aunque me diera un porcentaje erróneo, me felicitó, que estaba bajando muy bien de peso y me recordó que era importante lo de caminar una hora al día. Yo le comenté que voy tres veces a la semana al gimnasio, así que, en total hago más de una hora diaria y me dijo que esto iba estupendo para modelar la figura...
La nota negativa de la visita fue que le enseñé las cicatrices a la cirujana, que andaba en el despacho vecino, y me dijo que me van a quedar queloides, pequeños pero queloides al fin y al cabo. Me volvió a dar una muestra de trofolastin. Parece ser que entendí mal su uso: yo los usé un par de semanas durante el verano, para evitar la exposición al sol pero resulta que como sirven para cicatrizar, debía llevarlos mucho tiempo más. Así que ahora tendré que volver a comprar. Lo que no sé es si llevo los parches, no me voy a poder poner rosa mosqueta, no?
En fin, los queloides tampoco no me van a quitar el sueño!
Ayer hice cambio de armario y solamente me sirven dos pantalones que me compré no hace mucho. No podré llevar ninguno de los del año pasado. Con los jerseis aún se puede apurar más, pero seguramente también tendré que hacer algunas compras. Lo que más rabia me da es que estos últimos años me había aficionado a la media y me había confeccionado algunos jerseis holgados y, claro, ahora me bailan y no los voy a poder aprovechar. !Con lo que me costó hacerlos! Pero ya prefiero esto que no que me fueran pequeños, ¿no os parece?
Bueno, os dejo que hoy he escrito un testamento. Si a alguien le interesa, que me lo diga y cuelgo el menú de ejemplo que me dieron, pero como siempre, cada médico tiene su protocolo y generalmente las indicaciones de uno no sirven para otros. Yo he leido de personas operadas en septiembre que ya están comiendo lo mismo que yo, que me operé en julio. A mi me han tocado los médicos más prudentes... Espero que al final se note en algo, porque tanto tiempo con triturados ha sido un poco agonía (solamente un poco, eh?).
Un beso y gracias por leerme.
Me preguntó si había vomitado o si algo me había caído mal, a lo que le dije que no y me dijo que esto era porque había hecho las cosas bien. Me dijo que a partir de ahora, coma en plato de postre (ya lo hacía) y con cubiertos de postre (también lo hacía). Que no me pase de los 100 ml. de siempre y que lo mastique todo muy bien y durante un buen rato para que al tragar tenga consistencia pastosa. Me recordó que no se puede beber durante las comidas y yo le dije que esto era lo más duro y que lo que hacía era beber 10 minutos antes o después, no esperar la media hora o la hora recomendada. Me preguntó si me caía bien y como le dije que sí, me dió su consentimiento a seguir así.
Sobre la comida, puedo comer casi de todo, de momento como si hiciera dieta. Me explico: dentro de los alimentos totalmente desaconsejados (que no prohibidos) están los dulces, bollería, helados cremosos, chocolate, frutos secos, aguacate,embutidos y carnes grasas, mantequilla, refrescos azucarados, vino y licores, leche condensada, quesos grasos, mermeladas y conservas de pescado con aceite o escabeche, etc., es decir, lo mismo que te quitan cuando haces dieta. Eso no significa que excepcionalmente no lo pueda comer, pero si queremos perder peso, es conveniente comer cosas más saludables...
También me han recomendado no comer verduras flatulentas como la col, coliflor, pimientos (no tenía ni idea que fuera flatulento) y también las alcachofas. Y que utilice sacarina en vez de azúcar (eso lo he estado haciendo toda la vida, así que vamos a continuar con ello!).
Entonces, ¿qué puedo comer? Os pongo la lista a continuación:
- Lácteos: leche y yogur (mejor desnatados), queso fresco, flan, natillas.
- Carne magra picada (hamburguesas, albóndigas)
-Pescado blanco (lenguado, rodaballo, gallo, merluza, rape, bacalao...)
-Huevo (en tortilla o pasado por agua. Supongo que duro también vale, porque es de la única manera que me lo puedo comer...)
-Embutidos: jamón york y pavo.
-Patatas, solamente hervidas y 50 g al día.
-Verduras: todas a excepción de las que he comentado antes. Se toleran mejor hervidas o en puré, pero también puedo empezar a tomarlas en ensalada.
-Fruta fresca madura o cocida (no en almíbar).
-Cereales: arroz, pasta, pan tostado.
La idea es comer algo cada 2-3 horas, un mínimo de 6 veces al día y en función del hambre, más. Yo empecé el viernes e hice las 8 tomas que recomiendan en el menú de ejemplo (estos días en que me tiene que venir la regla, tengo mucha más hambre que el resto del mes.).
Ya he tomado pan tostado, tomate, pepino y espárragos blancos en ensalada, huevo duro, granada... y todo me ha sentado fenomenal. Como ya os comenté en la entrada anterior, hace algunas semanas ya empecé a tomar jamón york y queso fresco y también hamburguesa de ternera (casera) y arroz (paella) sin triturar.
En cuanto al peso, la nutrióloga me dijo que debía quedarme con 62 quilos (a mi me parece excesivo, pero de momento esa va a ser mi meta). Según su báscula, en la que me peso vestida, pesaba 75,3 kg. (En la mía, desnuda, 74 kg). Según ella, he perdido un 39% de lo que tengo que perder pero a mi no me salen las cuentas: si pesaba 89,5 antes de la operación (según sus datos, que no los míos), y tengo que llegar a 62, son 27,5. Si he perdido 14,2, entonces me quedan por perder 13,3 así pues, he perdido algo más del 50% del peso en que, según ellos, debo quedarme. Ya veremos...
En fin, aunque me diera un porcentaje erróneo, me felicitó, que estaba bajando muy bien de peso y me recordó que era importante lo de caminar una hora al día. Yo le comenté que voy tres veces a la semana al gimnasio, así que, en total hago más de una hora diaria y me dijo que esto iba estupendo para modelar la figura...
La nota negativa de la visita fue que le enseñé las cicatrices a la cirujana, que andaba en el despacho vecino, y me dijo que me van a quedar queloides, pequeños pero queloides al fin y al cabo. Me volvió a dar una muestra de trofolastin. Parece ser que entendí mal su uso: yo los usé un par de semanas durante el verano, para evitar la exposición al sol pero resulta que como sirven para cicatrizar, debía llevarlos mucho tiempo más. Así que ahora tendré que volver a comprar. Lo que no sé es si llevo los parches, no me voy a poder poner rosa mosqueta, no?
En fin, los queloides tampoco no me van a quitar el sueño!
Ayer hice cambio de armario y solamente me sirven dos pantalones que me compré no hace mucho. No podré llevar ninguno de los del año pasado. Con los jerseis aún se puede apurar más, pero seguramente también tendré que hacer algunas compras. Lo que más rabia me da es que estos últimos años me había aficionado a la media y me había confeccionado algunos jerseis holgados y, claro, ahora me bailan y no los voy a poder aprovechar. !Con lo que me costó hacerlos! Pero ya prefiero esto que no que me fueran pequeños, ¿no os parece?
Bueno, os dejo que hoy he escrito un testamento. Si a alguien le interesa, que me lo diga y cuelgo el menú de ejemplo que me dieron, pero como siempre, cada médico tiene su protocolo y generalmente las indicaciones de uno no sirven para otros. Yo he leido de personas operadas en septiembre que ya están comiendo lo mismo que yo, que me operé en julio. A mi me han tocado los médicos más prudentes... Espero que al final se note en algo, porque tanto tiempo con triturados ha sido un poco agonía (solamente un poco, eh?).
Un beso y gracias por leerme.
6/10/13
Confesiones...
Hola!!!
Ya estamos en octubre y pronto hará tres meses de la operación. Aún estoy con triturados, pero os tengo que confesar, de ahí el título de la entrada, que últimamente tengo algunos antojitos y que he caído en algunos. Bueno, he caído porque, leyendo otras experiencias de operados, no veo a nadie que le tengan hasta el tercer mes sin comer sólidos, así que, por mi cuenta (y riesgo!) me he excedido un poco en lo que debía comer.
Un día me levanté con unas ganas locas de tomar patatas fritas, de las de bolsa. Y pensé que, total, si en la boca se humedecen y se pueden triturar bien, pues que podía comerlas. Pero al final, compré tiritas de maíz (Fritos creo que se llaman) y me comí unos cuantos. Me sentaron bien, la verdad, perooooo no solamente he estado estancada en el peso durante una semana, sino que, peor aún, subí un quilo!!! Glups, por comer unos Fritos???? Ahhh! Total, que esta semana me he machacado en el gimnasio. He podido ir tres días y, finalmente, he vuelto a bajar ese quilo, pero caramba qué fácil es subirlo.
En fin, ya me estoy hartando de los triturados y hoy, que he hecho paella, en lugar de triturármela como he hecho otras veces, me la he comido directamente. Claro que menos de medio plato de postre y muy lentamente. Me ha caído todo lo bien que me cae la comida desde la operación. Quiero decir que no me cae mal, pero noto que la digestión es mucho más pesada que antes. Quizás porque antes no tenía ningún problema de digestión... Espero que con el tiempo, la cosa mejore.
El otro día, por ejemplo, descubrí que el agua a temperatura ambiente ya no me caía mal, como al principio, así que, seguramente según vayan avanzando los meses, las digestiones serán más leves. O eso espero.
Bueno, este jueves voy a la nutrióloga para que me dé las indicaciones de la tercera fase de la alimentación. Ya os comentaré en qué consiste.
Un beso a tod@s
Ya estamos en octubre y pronto hará tres meses de la operación. Aún estoy con triturados, pero os tengo que confesar, de ahí el título de la entrada, que últimamente tengo algunos antojitos y que he caído en algunos. Bueno, he caído porque, leyendo otras experiencias de operados, no veo a nadie que le tengan hasta el tercer mes sin comer sólidos, así que, por mi cuenta (y riesgo!) me he excedido un poco en lo que debía comer.
Un día me levanté con unas ganas locas de tomar patatas fritas, de las de bolsa. Y pensé que, total, si en la boca se humedecen y se pueden triturar bien, pues que podía comerlas. Pero al final, compré tiritas de maíz (Fritos creo que se llaman) y me comí unos cuantos. Me sentaron bien, la verdad, perooooo no solamente he estado estancada en el peso durante una semana, sino que, peor aún, subí un quilo!!! Glups, por comer unos Fritos???? Ahhh! Total, que esta semana me he machacado en el gimnasio. He podido ir tres días y, finalmente, he vuelto a bajar ese quilo, pero caramba qué fácil es subirlo.
En fin, ya me estoy hartando de los triturados y hoy, que he hecho paella, en lugar de triturármela como he hecho otras veces, me la he comido directamente. Claro que menos de medio plato de postre y muy lentamente. Me ha caído todo lo bien que me cae la comida desde la operación. Quiero decir que no me cae mal, pero noto que la digestión es mucho más pesada que antes. Quizás porque antes no tenía ningún problema de digestión... Espero que con el tiempo, la cosa mejore.
El otro día, por ejemplo, descubrí que el agua a temperatura ambiente ya no me caía mal, como al principio, así que, seguramente según vayan avanzando los meses, las digestiones serán más leves. O eso espero.
Bueno, este jueves voy a la nutrióloga para que me dé las indicaciones de la tercera fase de la alimentación. Ya os comentaré en qué consiste.
Un beso a tod@s
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